Robé una foto y ahí comenzó el sueño

Soy Alan Robles, fotógrafo de bodas. Desde hace cinco años tengo una cámara en la mano; sin embargo, mi pasión por la fotografía de bodas surgió hace no tanto…

Robé una foto y ahí comenzó el sueño

Hace tres años, un hecho casual puso en tela de juicio los planes que tenía para mi vida; y es que, ¿no dicen que las oportunidades se presentan cuando menos las esperamos?

Paseaba por el parque Colomos en Guadalajara en busca de una locación para realizar una entrevista cuando me llamó la atención el trabajo que realizaba una fotógrafa con una pareja. Los miré por algunos minutos y de pronto, sin siquiera cuestionármelo, hice algo que jamás había hecho: “robé” una foto.

Digo “robar” por ponerle un nombre – despistadamente me puse atrás de la fotógrafa y cuando estaba distraída comencé a hacer unas cuantas tomas de la pareja sin que nadie se diera cuenta – ; como el último cerillo que es capaz de crear fuego en un poco de combustible algo se encendió dentro de mí y ahí comenzó el sueño de un fotógrafo (yo) de convertirse en un fotógrafo de bodas.

Jamás supe quién era la fotógrafa y tan sólo conservo una de las fotos de aquel par de tortolitos que me dieron la oportunidad (sin saberlo) de poner al amor frente a mi lente por primera vez.

Hoy, tres años más tarde y luego de prepararme arduamente durante los últimos dos, les doy la bienvenida a mi sueño y a lo que mi “cambio de planes” me ha traído.

Alan Robles | Wedding & Love

Photographer

Soy Alan Robles, fotógrafo de bodas con residencia en Guadalajara, y es mi esencia capturar los momentos tal como la vida los ha preparado; soy fanático de retratar bodas, bautizos y de tener al amor frente a mi lente.

La fotografía de bodas me ha dado, entre otras experiencias de incalculable valor, aquella de hacer que mi alma sonría, y poder compartir esa sonrisa. Será un placer capturar los instantes más valiosos de tu boda, que a veces parecen tan breves pero que pueden ser eternos. Mi arte documental te hará volver a vivir cada momento especial; no se esfumarán jamás.

En México o en cualquier parte del mundo estaré acompañándote, y será un honor hacer mía tu felicidad en ese día tan especial no sólo como fotógrafo sino también como amigo.

Fotógrafo de bodas; ¿por qué?

La fotografía de bodas es la experiencia de vida que me ha permitido disfrutar y compartir momentos increíbles: el poder retratar los sentimientos de una novia minutos antes del momento donde ella será el centro de atención, el sentir la impaciencia de un novio por ver al amor de su vida vestida de blanco… pero sobre todo el poder capturar el instante maravilloso que marca el principio de una nueva vida para los dos.

Un instante perfecto capturado en un segundo. ¿Quién le dice que no al amor? Ser fotógrafo de bodas ha hecho que cada click frente a un sentimiento puro sea un motivo de felicidad para mí. Y la felicidad crece cuando se comparte.

¡Gracias!

Clientes que se han convertido en grandes amigos y amigos que se han convertido en clientes, estoy profundamente agradecido con ustedes por poner en mis manos la confianza para retratar uno de los momentos más importantes en la vida, su boda; han sido ustedes los que han hecho que me comprometa cada día a ofrecer mejores recuerdos y quienes me convirtieron en un fotógrafo de bodas.

Gracias a mi familia, amigos, mentores, a las personas que me han capacitado, fotógrafos que han compartido su experiencia conmigo y a todos los que de una u otra manera han formado parte del camino que hoy estoy recorriendo.

No puedo dejar fuera a dos personas fundamentales en este equipo: Carlos Ortega (segunda cámara), gracias por seguir este sueño conmigo, por tu apoyo y por poner todo tu empeño en cada momento, sin duda el mejor colega, socio y amigo; Cruz Rosales (asistente), gracias por siempre tener una mano libre para ayudar y las ganas y disposición de siempre aprender.

Todos ustedes forman parte de Alan Robles | Wedding & Love Photographer y han impulsado a que sea posible.

Llegó el momento

Cuando este sueño comenzó, me comprometí conmigo mismo para que sólo en el momento que el proyecto estuviera listo en madurez, calidad y sentimiento, lo daría a conocer. Hoy los invito a celebrar conmigo, pues ese día ha llegado.

¿Boda? ¿Cuándo nos vemos?

Alan Robles