Su alma emprendedora, guerrera y pachanguera hizo que se convirtieran en unos de mis grandes amigos, pasamos momentos súper chingones desde su preboda y por supuesto eso se repitió en este día. Comenzamos en el Hotel Boutique Raíces del Alma en Tlaquepaque con unos tragos de tequila para luego festejar en el Real San Pedro. Un honor ser su fotografo; sin duda un gran día, disfruten tanto como nosotros.